viernes, 18 de mayo de 2012

Una luz en la noche

Un tibio rayo de sol alcanzó su rostro dormido. Abrió los ojos lentamente, al tiempo que la luz le cosquilleaba el entumecido cuerpo.
“Oh Sol, ¡te he soñado tantas veces! ¡Quiero decirte tantas cosas que sé que no te diré nada! Déjame sólo contemplar tu dorada faz antes de que la noche vuelva a atraparme con sus pesados brazos. Déjame el recuerdo de que al menos una vez te tuve enfrente. Déjame el consuelo de seguirte soñando, y así en mi letargo creeré que me estás esperando”

3 comentarios:

  1. Me gusta la prosa poética, y esta la has bordado.

    Un abrazo
    Jesús

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  2. Interesante pieza que, como bien lo dice, Jesús, se acerca mucho a la prosa poética.

    ¡Bienvenida a la Blogósfera! Muchas gracias por el follow a Las Tierras Destrozadas; espero poder leerte más y que, ojalá, comentes lo que te parezca en mi Blog.

    Saludos cordiales,

    F.

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